El árticulo publicado acerca del "desarrollo psicoevolutivo del niño con sordera", me ha hecho reflexionar bastante acerca del tema. Es primer lugar, es cierto que no podemos medir la inteligencia de un niño con cualquier tipo de deficiencia auditiva a través de los tradicionales test de inteligencia, puesto que los resultados van a ser negativos y esto va a afectar al futuro del niño que se le considerará deficiente mental, cuando como dice el árticulo, ésto no es así. Un niño con problemas auditivos puede llegar a ser tan inteligente o incluso más inteligente que un niño "normal" (sin deficiencia auditiva). Puesto que la audición, no altera a la cognición. En segundo lugar, hablando sobre el tema de cualquier niño con deficiencia auditiva y su futuro laboral o personal, podría decir que con un buen trabajo docente, logopédico, médico y psicológico hacia el niño/a, éste/a puede llegar a triunfar como cualquier niño/a sin deficiencia auditiva. Como he expresado anteriormente, la cognición no va ligada a la audición.
Tras leer este artículo acerca de la inteligencia de los niños con deficiencia auditiva, me gustaría aportar que la sociedad es la mayor culpable de que estos se sientan inferiores en todos los aspectos a los niños normoyentes, quizás antes esto era debido a los test que se realizaban, los cuales los dejaban como deficientes mentales, pero es que hoy en día estos test no se siguen realizando y aun así todos nosotros (muchas veces sin darnos cuenta) todavía seguimos haciéndolos sentir inferiores, por diversas causas , como la etiquetación. Creo que este artículo debería hacernos reflexionar un poco a todos y darnos cuenta de una vez que una persona con deficiencia visual, puede ser igual o incluso más inteligente que una persona que no padezca este déficit, y que la causa de que muchas veces no lo parezca es por el simple hecho de que muchos de ellos adquieren de forma más tardía el lenguaje, el cual los hace ser capaz de expresarse en todos los sentidos.
creo que este articulo lo que nos abre un poco los ojos respecto al problema de utilizar test para escolarizar a niños/as sordos. pero el problema no radica en saber el CI de un niño sordo, sino como hemos en los temas que hemos dado en clase, es el hacer un scrining para detectar lo más pronto posible la sordera,la intelengia de un niño sordo y de un niño "normal" en le momento del nacimiento es igual, solo que hay que enseñarles a desarrollarla, al igual que un niño sano.PEro para eso deberiamos de cambiar la actitud de muchos padres, para conseguir que actuan lo antes posible con el niño,lo saquen para interaccionar con el entorno y la sociedad.con esto conseguriamos que el niño sordo tenga las posibilidaes que el niño sano. y para terminar creo que la sociedad y sobre todo las administraciones deberian de aprender ellos algo de los sordos y no tacharlo de "deficientes"
Depues de haber leido el articulo cabe destacar los errores que se cometen a la hora de evaluar la inteligencia de los deficientes auditivos.Primeramente los errores se achacan a los test que se utilizaban , puesto que los resultados siempre eran negativos y automaticamente se les consideraban deficientes mentales.En segundo lugar la sociedad tiene gran parte de culpa ya que siempre se considerara (desgraciadamente) a los deficientes auditivos como "INFERIORES INTELIGENTEMENTE".Y esto no es asi.Una persona con deficiencia auditiva puede llegar a ser igual o mas inteligente que una persona normoyente.
Tras finalizar la lectura del artículo estoy básicamente de acuerdo con todo lo que se expone en éste. La falsa creencia de que las personas con deficiencia auditiva tienen un CI menor al de una persona normoyente es mítico y la gran parte de culpa la tiene la sociedad, porque a éstas personas cuando se les adapta aspectos como la educación a sus posibilidades como la lengua de signos o a ellos se les proporciona la debida ayuda como el aprendizaje de lectura de labios, éstos son capaces de realizar la misma tarea o obtener el mismo resultado que una persona normoyente. Con todo ésto lo que quiero decir es que tenemos que tener claro que, tanto una persona sorda como una persona normoyente, que son capaces de conseguir lo mismo siempre y cuando se les adapte a las dificultades que cada una pueda tener.
Me alegra comprobar que este artículo os ha hecho aún más conscientes de la necesidadd de romper con muchos estereotipos socio-educativos que, para nada, ayudan a la inclusión social y educativa de las personas con disCAPACIDAD, en este caso, asociadas a una deficiencia y/o disCAPACIDAD auditiva.Por tanto, es preciso y necesario realizar una correcta y adecuada evaluación logopédica y psicopedagógica (psicológica, curricular y socio-afectiva), dependiendo del tipo de disCAPACIDAD que tenga el alumno/a, ya que va a ser clave para dar una respuesta adecuada. Hay un dicho que dice algo así: "dime cómo evalúas y te diré qué tipo de profesional eres". Además, no hemos de olvidar la importancia que tiene la detección precoz de una deficiencia y, por tanto, la adecuada atención temprana. Lo que sí está claro es que un niño/a sordo puede ser igual o más inteligente que un niño normoyente.
Yolanda Pérez Calderón En mi opinion, estoy completamente de acuerdo con el articulo leido. En primer lugar, no podemos creer que los deficientes auditivos tienen una inteligencia menor que la de los oyentes,ya que esta deficiencia, solo se ve perjudicada pro problemas de audicion y no de cognicion. En segundo lugar, el tema de los test, es algo logico,ya que, no es lo mismo realizar test de tipo linguistico a un normoyente que a un deficiente auditivo, por lo cual habria que realizar test a estas personas de tipo visual sobretodo y los resultados serian mas equitativos.Por suerte, hoy en dia estos temas estan mucho mas estudiados, por lo cual los deficientes auditivos tienen muchas mas ayudas y un mejor desarrollo.
despues de leer el documento, me he encontrado con que las personas sordas llevan vien dose como retrasados mentales bastante tiempo,algo que no es nada cierto. Estas personas debido a el retarimiento que le ha causado la sociedad, se han visto afectadas en muchos factores, cosa que les ha impedido a muchos el poder llegar a un nivel igual que el de los oyentes; gracias a dios, que la sociededa se esta volcando cada vez más en estas personas,y les ayuda para que puedan conseguir sus expectativas, algo que satisface y llena a la persona
Después de haber reflexionado sobre el artículo que trata sobre la psicoevolución de los niños con deficiencia auditiva, me gustaría centrarme en dos cuestiones; la primera: ¿eran los test utilizados los más adecuados para medir la inteligencia de los niños con problemas auditivos?, pienso que la utilización de esos test era totalmente incorrecta, ya que no pienso que los niños normoyentes y los niños sordos, estuvieran en igualdad de condiciones al pasar el test ya que los niños sordos, al no tener el mismo nivel auditivo y este problema no ser reconocido por sus profesores no podían responder de la misma manera que el resto de niños, y simplemente por desconocer la situación eran considerados como deficientes mentales, cuando los niños al nacer nacen con la misma inteligencia, independientemente de tener un déficit auditivo. Por suerte la sociedad ha ido evolucionando y este recurso arcaico de medir la inteligencia, ya no se utiliza.
La segunda cuestión que me planteó, es la siguiente: ¿Está la sociedad totalmente concienciada del problema de estas personas?, realmente pienso que no del todo. Pienso que para mejorar el desarrollo psicoevolutivo del niño con déficit auditivo, habría que familiarizar al niño y su familia lo antes posible con algún sistema alternativo de comunicación como el lenguaje de signos, el lenguaje labio-facial, o cualquier otro. Con esto se avanzaría muchísimo en la integración del niño en la sociedad, ya que desde muy pequeño se podrá comunicar con los demás sin ningún tipo de reparo, y así poder expresarse como el resto de niños. Pero no pienso que esto sea lo único que podamos hacer, sino que veo necesario que en la actualidad hubieran más campañas de concienciación para que la sociedad se pusiera en la piel de estas personas y se interesaran e hicieran lo posible por aprender un sistema alternativo de comunicación, para que así la comunicación pudiera fluir entre todos sin ningún tipo de obstáculos.
- Amo, Monserrat del (1983). La piedra de toque. La lucha de alguien diferente. Madrid: Ediciones SM.
- Hall, Kenneth (2003). SOy un niño con síndorme de Asperger. Barcelona: Ediciones Piados. (Versión original inglesa: Asperger síndrome, the universe and everything, Londres; Cathy Miller Fereign Right Agency).
- Sacks, Oliver (2003). Veo una voz. Viaje al mundo de los sordos. Barcelona: Anagrama. (Versión original inglesa se 1989, Seeing voices: a journey into the world of the deaf, Berkeley; University of California Press).
- Vila, Anna (1999). Tengo una hija deficiente. Evolución, socialización y tratamiento de una niña deficiente. Madrid: Nercea.
FORMACIÓN DEL PROFESORADO Y ATENCIÓN A LA DIVERSIDAD
El árticulo publicado acerca del "desarrollo psicoevolutivo del niño con sordera", me ha hecho reflexionar bastante acerca del tema. Es primer lugar, es cierto que no podemos medir la inteligencia de un niño con cualquier tipo de deficiencia auditiva a través de los tradicionales test de inteligencia, puesto que los resultados van a ser negativos y esto va a afectar al futuro del niño que se le considerará deficiente mental, cuando como dice el árticulo, ésto no es así. Un niño con problemas auditivos puede llegar a ser tan inteligente o incluso más inteligente que un niño "normal" (sin deficiencia auditiva). Puesto que la audición, no altera a la cognición. En segundo lugar, hablando sobre el tema de cualquier niño con deficiencia auditiva y su futuro laboral o personal, podría decir que con un buen trabajo docente, logopédico, médico y psicológico hacia el niño/a, éste/a puede llegar a triunfar como cualquier niño/a sin deficiencia auditiva. Como he expresado anteriormente, la cognición no va ligada a la audición.
ResponderEliminarJosé Rubén Gómez Aliaga
Tras leer este artículo acerca de la inteligencia de los niños con deficiencia auditiva, me gustaría aportar que la sociedad es la mayor culpable de que estos se sientan inferiores en todos los aspectos a los niños normoyentes, quizás antes esto era debido a los test que se realizaban, los cuales los dejaban como deficientes mentales, pero es que hoy en día estos test no se siguen realizando y aun así todos nosotros (muchas veces sin darnos cuenta) todavía seguimos haciéndolos sentir inferiores, por diversas causas , como la etiquetación. Creo que este artículo debería hacernos reflexionar un poco a todos y darnos cuenta de una vez que una persona con deficiencia visual, puede ser igual o incluso más inteligente que una persona que no padezca este déficit, y que la causa de que muchas veces no lo parezca es por el simple hecho de que muchos de ellos adquieren de forma más tardía el lenguaje, el cual los hace ser capaz de expresarse en todos los sentidos.
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarcreo que este articulo lo que nos abre un poco los ojos respecto al problema de utilizar test para escolarizar a niños/as sordos. pero el problema no radica en saber el CI de un niño sordo, sino como hemos en los temas que hemos dado en clase, es el hacer un scrining para detectar lo más pronto posible la sordera,la intelengia de un niño sordo y de un niño "normal" en le momento del nacimiento es igual, solo que hay que enseñarles a desarrollarla, al igual que un niño sano.PEro para eso deberiamos de cambiar la actitud de muchos padres, para conseguir que actuan lo antes posible con el niño,lo saquen para interaccionar con el entorno y la sociedad.con esto conseguriamos que el niño sordo tenga las posibilidaes que el niño sano. y para terminar creo que la sociedad y sobre todo las administraciones deberian de aprender ellos algo de los sordos y no tacharlo de "deficientes"
ResponderEliminarDepues de haber leido el articulo cabe destacar los errores que se cometen a la hora de evaluar la inteligencia de los deficientes auditivos.Primeramente los errores se achacan a los test que se utilizaban , puesto que los resultados siempre eran negativos y automaticamente se les consideraban deficientes mentales.En segundo lugar la sociedad tiene gran parte de culpa ya que siempre se considerara (desgraciadamente) a los deficientes auditivos como "INFERIORES INTELIGENTEMENTE".Y esto no es asi.Una persona con deficiencia auditiva puede llegar a ser igual o mas inteligente que una persona normoyente.
ResponderEliminarTras finalizar la lectura del artículo estoy básicamente de acuerdo con todo lo que se expone en éste. La falsa creencia de que las personas con deficiencia auditiva tienen un CI menor al de una persona normoyente es mítico y la gran parte de culpa la tiene la sociedad, porque a éstas personas cuando se les adapta aspectos como la educación a sus posibilidades como la lengua de signos o a ellos se les proporciona la debida ayuda como el aprendizaje de lectura de labios, éstos son capaces de realizar la misma tarea o obtener el mismo resultado que una persona normoyente. Con todo ésto lo que quiero decir es que tenemos que tener claro que, tanto una persona sorda como una persona normoyente, que son capaces de conseguir lo mismo siempre y cuando se les adapte a las dificultades que cada una pueda tener.
ResponderEliminarMe alegra comprobar que este artículo os ha hecho aún más conscientes de la necesidadd de romper con muchos estereotipos socio-educativos que, para nada, ayudan a la inclusión social y educativa de las personas con disCAPACIDAD, en este caso, asociadas a una deficiencia y/o disCAPACIDAD auditiva.Por tanto, es preciso y necesario realizar una correcta y adecuada evaluación logopédica y psicopedagógica (psicológica, curricular y socio-afectiva), dependiendo del tipo de disCAPACIDAD que tenga el alumno/a, ya que va a ser clave para dar una respuesta adecuada. Hay un dicho que dice algo así: "dime cómo evalúas y te diré qué tipo de profesional eres". Además, no hemos de olvidar la importancia que tiene la detección precoz de una deficiencia y, por tanto, la adecuada atención temprana. Lo que sí está claro es que un niño/a sordo puede ser igual o más inteligente que un niño normoyente.
ResponderEliminarYolanda Pérez Calderón
ResponderEliminarEn mi opinion, estoy completamente de acuerdo con el articulo leido. En primer lugar, no podemos creer que los deficientes auditivos tienen una inteligencia menor que la de los oyentes,ya que esta deficiencia, solo se ve perjudicada pro problemas de audicion y no de cognicion. En segundo lugar, el tema de los test, es algo logico,ya que, no es lo mismo realizar test de tipo linguistico a un normoyente que a un deficiente auditivo, por lo cual habria que realizar test a estas personas de tipo visual sobretodo y los resultados serian mas equitativos.Por suerte, hoy en dia estos temas estan mucho mas estudiados, por lo cual los deficientes auditivos tienen muchas mas ayudas y un mejor desarrollo.
despues de leer el documento, me he encontrado con que las personas sordas llevan vien dose como retrasados mentales bastante tiempo,algo que no es nada cierto. Estas personas debido a el retarimiento que le ha causado la sociedad, se han visto afectadas en muchos factores, cosa que les ha impedido a muchos el poder llegar a un nivel igual que el de los oyentes; gracias a dios, que la sociededa se esta volcando cada vez más en estas personas,y les ayuda para que puedan conseguir sus expectativas, algo que satisface y llena a la persona
ResponderEliminarDespués de haber reflexionado sobre el artículo que trata sobre la psicoevolución de los niños con deficiencia auditiva, me gustaría centrarme en dos cuestiones; la primera: ¿eran los test utilizados los más adecuados para medir la inteligencia de los niños con problemas auditivos?, pienso que la utilización de esos test era totalmente incorrecta, ya que no pienso que los niños normoyentes y los niños sordos, estuvieran en igualdad de condiciones al pasar el test ya que los niños sordos, al no tener el mismo nivel auditivo y este problema no ser reconocido por sus profesores no podían responder de la misma manera que el resto de niños, y simplemente por desconocer la situación eran considerados como deficientes mentales, cuando los niños al nacer nacen con la misma inteligencia, independientemente de tener un déficit auditivo. Por suerte la sociedad ha ido evolucionando y este recurso arcaico de medir la inteligencia, ya no se utiliza.
ResponderEliminarLa segunda cuestión que me planteó, es la siguiente: ¿Está la sociedad totalmente concienciada del problema de estas personas?, realmente pienso que no del todo. Pienso que para mejorar el desarrollo psicoevolutivo del niño con déficit auditivo, habría que familiarizar al niño y su familia lo antes posible con algún sistema alternativo de comunicación como el lenguaje de signos, el lenguaje labio-facial, o cualquier otro. Con esto se avanzaría muchísimo en la integración del niño en la sociedad, ya que desde muy pequeño se podrá comunicar con los demás sin ningún tipo de reparo, y así poder expresarse como el resto de niños. Pero no pienso que esto sea lo único que podamos hacer, sino que veo necesario que en la actualidad hubieran más campañas de concienciación para que la sociedad se pusiera en la piel de estas personas y se interesaran e hicieran lo posible por aprender un sistema alternativo de comunicación, para que así la comunicación pudiera fluir entre todos sin ningún tipo de obstáculos.
Amanda Gil Cena