A continuación, se cuenta de forma muy sintética una investigación del psicólogo Robert Rosenthal de la Universidad de Harvard, que aparece en su libro "Pygmalion in the classroom".
En una escuela de dieciocho maestras y más de seiscientos cincuenta alumnos, la profecía que se autocumple se introdujo en el cuerpo docente del modo siguiente: antes de empezar el año escolar, los alumnos debían ser sometidos a un test de inteligencia y se comunicó a las mestras que, según el test, había un 20% de alumnos que durante el año escolar harían rápidos progresos y tendrían un rendimiento por encima del término medio. Después de la administración del test, pero antes de que las maestras entraran por primera vez en contacto con sus nuevos alumnos, se les entregaron los nombres de aquellos alumnos (realmente era una lista con nombres al azar) de quienes se podría esperar con seguridad un desempeño extraordinario según los test. De esta manera, la diferencia entre esos alumnos y los demás chicos estaba solamente en la cabeza de su maestra. Al terminar el año escolar se repitió el mismo test de inteligencia administrado a todos los alumnos, y efectivamente resultaron cocientes de inteligencia superiores al término medio en aquellos alumnos "especiales", además el informe del cuerpo docente señalaba que esos niños aventajaban a sus condiscípulos también en conducta, en curiosidad intelectual, en simpatía,...
1. ¿Dedicamos tiempo a pensar en la importancia de lo que "tenemos en nuestras manos"?2. ¿Hasta qué punto nos dejamos influenciar por comentarios, expedientes, informes...?
3. ¿A qué se debe el éxito o no de un alumno/a? ¿Podemos influir en él?
4. ¿Qué es lo que vemos en el alumnado: déficits o potencialidades?
5. ¿Cómo habría de hacerse o interpretarse una evaluación psicopedagógica para no caer en el etiquetado y sea una herramienta útil y necesaria para atender a la diversidad?
6. ¿Qué uso se le da a las evaluaciones psicopedagógicas? ¿Se pueden convertir en profecías autocumplidas?
Me resulta francamente interesante esta investigación, ya que NO debemos etiquetar a nuestros alumnos, ni positiva ni negativamente (tendencia que es común en algunos docentes); el crear estereotipos no les ayuda, más bien es un atraso: tenemos una gran responsabilidad. Con respecto a la segunda pregunta, no deberíamos dejarnos influenciar; ello no quiere decir que no se tengan en cuenta los expedientes e informes, sino utilizarlos solo de manera informativa, siempre siendo conscientes que no siempre reflejan objetivamente la realidad, y comprobando las informaciones.
ResponderEliminarPienso que el éxito de un alumno se debe a múltiples factores: emocionales, cognitivos…, una mezcla de todo, pero creo que el que se sienta seguro mientras aprende es un aspecto fundamental, y es por esto que podemos influir en ellos, animándoles, ayudándoles a que vean las cosas positivas que tienen, que en más ocasiones de las que ellos creen saben hacer bien las cosas, y que no se nace sabiendo; de aquí es deducible que yo prefiera reforzarles con sus potencialidades, creo que decirles sus déficits hace que se frustren.
Creo que en la creación e interpretación de una evaluación psicopedagógica no deberíamos estar tan “obsesionados” con asociar una determinada deficiencia a los niños, sino más bien analizar objetivamente todos los datos recibidos y comprobados, así como resaltar también los aspectos positivos, lo que el niño sabe hacer (y no solo todo lo que no hace).
Creo que una evaluación psicopedagógica es muy importante, pues ello ayuda a que el niño mejore, y que son un elemento clave para que los profesores de ese alumno sepan cómo ayudarlo. La verdad es que no me gustaría que fuesen profecías autocumplidas, sino una herramienta que nos facilite nuestra labor como docente y lo más importante, que ayude al alumno.
1º:Yo opino o quiero pensar que sí, que la mayoría de los maestros saben "lo que tienen en las manos", aunque otros no lo sepan o no les interese saberlo. Son nuestro futuro, de nosotros dependen.
ResponderEliminar2º:Creo que sobre todo cuando lleguas nuevo/a a un centro sí que algo te vas a dejar influenciar por comentarios, opiniones y claro esta, por el informe del alumno, ahora bien, debemos de comprobar toda esa información por nosotros mismos, ya que nuestra experiencia con ese niño puede ser diferente a la de los demás. Pienso que aunque hay que "escuchar esas opiniones" tampoco deben de condicionar de antemano nuestro trabajo con ese alumno. Como ocurre en el estudio anterior.
3º: El éxito de un alumno se pueden deber a muchos factores, no sólo de fracasa por culpa del alumno, del maestro, etc. Hay que tener en cuenta otros factores, como el entorno social y cultural del niño, la comunidad educativa, si es aceptado por los demás, la motivación de ese alumno, los conocimientos previos,etc. Y para gran parte de ello está el profesor para lo que esté en su mano intentar el éxito del ese alumno.
4º: Yo creo que vemos lo que "queremos ver". Si un maestro, por muy mal que se presente el alumno se empeña en ver cosas positivas en él, al final las verá, pero si no las intenta buscar por muy difícil que sea no las verá. Ahí depende del profesor, si se quiere "acomodar" o se esfuerza en intentar sacar lo bueno que seguro que tiene el niño/a.
5º:Desde la objetividad, intentando beneficiar al alumno, con esa evaluación psipedagógica, en la medida de lo posible.
6º:Con esta evaluación lo que se pretende es determinar qué alumnos necesitan una intervención, para después, planificar la enseñanza y realizar un seguimiento del aprendizaje por parte del alumno y comprobar la eficacia de esa intervención.
yo pienso que la mayoria de los profesionales de la educación si tienen en cuenta lo que tienen entre las manos, ya que si no fuese asi la educación de los alumnos sería lamentable, aunque si destacar que como en todas las profesiones siempre hay algunos incompetentes que no le prestan atención y eso hace que la calidad de la enseñanza se vaya deteriorando.
ResponderEliminarlos comentarios e informes de los alumnos si influyen al principio, cuando estan en las manos de cualquier educador ya que eso se supone que esta elaborado por otros profesionales, pero lo importante es luego constatar que lo que hay en el informe es cierto y si se ajusta o no a la realidad del alumno, no quedarnos con la simple información que nos dio otros. el éxito o no de un alumno puede venir condicionado por muchos factores tales como su ambiente familiar y escolar, su motivación, su nivel cognitivo,... pero como no tambien influye el maestro. El buen profesional debe de ver en los alumnos las dos cosas; sus déficits y sus potencialidades, ya que los primeros se deben mejorar y los segundo afianzar aún más si se puede, pero es cierto que en ocasiones se ven antes los déficit que las potencialidades. La evaluación psicopedagógica se debe intrepertar con objetividad y de forma que todo lo reflejado en ella sea de beneficio al alumno, pero debemos tambien tener en cuenta nuestro propio criterio y no solo dejarnos llevar por un documento que no olvidar que es muy importante.Pienso que el uso que se le da es el correcto, ya que con ella se puede ver las necesidades que el alumno tiene para enfrentarse a la enseñanza y de ella partir para llevar a cabo su aprendizaje.
Los maestros tenemos entre manos una realidad compleja que es a la vez, por lo menos a mi entender, la base de un país, y es la educación. Pienso que, desgracidamente, no todos los profesionales que trabajan con niños piensan en cuán importante es que reciban una educación adecuada, no a lo que cada uno crea que es lo adecuado, sino atendiendo a unas leyes y normativas vigentes, que pocas veces consultan; y que se aferran a expresiones del tipo "yo esto lo he hecho así siempre y así lo voy a seguir haciendo", "¿informática?, ¡si yo no se encender el ordenador!", claro que la culpa de todo esto no se la podemos arrojar sólamente a esos maestros y maestras que después de llevar 20 años dedicados a la educación de niños han visto cómo la administración, "se lava las manos" en el propio cumplimiento de la normativa o leyes vigente cómo puede ser el gran número de alumnos por aula, la escasez de recursos materiales en los centros, etc.
ResponderEliminarcon todo esto, quiero decir que los maestros que de verdad se preocuopan por la educación adecuada a sus alumnos, se enfrentan día a día con una serie de obstáculos que intentan saltar de la mejor manera posible, y que en raras ocasiones ese esfuerzo se ve de alguna manera reconocido.
En primer lugar decir que, aunque la investigación me parece interesante, estamos hablando de un caso concreto, es decir, habrá que realizar másinvestigaciones similares en diferentes contextos y comprobar que verdaderamente sucede de esa forma.
ResponderEliminar- respecto a la 1ª pregunta, decir que todos los docentes, o la mayoría de nosotros, siempre pensamos en lo que está en nuestras manos, porque lo que se pone en nuestras manos al principio de cada curso es el futuro de nuestra sociedad, pero también deberíamos pensar lo mismos los padres de esos niños. En 5 horas de clase no podemos solucionar los problemas que cada año se nos presentan en nuestras aulas;
- En segundo lugar, ceo que todos nos dejamos influenciar por comentarios, expedientes eincluso por el aspecto físico de nuestros alumnos, pero es algo que sucede también en la vida diaria. El refrán de" la primera impresión es loque cuenta" casi simprese lleva a cabo....pero esa impresión puede cambiar a lo largo del tiempo, cuando vamos conociendo realmente a los alumnos, a las personas, us capacidades, sus actitudes, suvalores, etc.Al final, loque cuenta es la suma detodo.
- La siguiente pregunta es algoconflictiva: ¿influimos en el éxito del alumno?...¿A que se debe tal éxito?... En mi opinión personal ceo que si influimos en el éxito o fracaso del alumno pero no de forma determinante.Cada niño es Mundo y a ese "Mundo" leafectan y lo forman variosy diferentes contextos, diferentesaspectos (cognitivos, eocionales, motivacionales,sensoriales...) Si un alumno es estimulado desde su casa, con sus familiares, en el contexto social en el que se mueve y vive, eso, se reflejará también en la escuela.
Para mí, la mayor importancia la tiene el papel quejuega la FAMILIA. Si hay implicación familiar, serán alumnos de éxito(dentro, claro estáde las posibilidades individuales de cada alumno)
- SI vemos déficits o potencialidades en los alumnos. Desde el momento en el que tomas el primer contacto con ellos, sabes como van a ser...es algo que te da la experiencia, yaunque llevo pocos años en esto, casi nunca me equivoco.Lo que hay que evitar es dejaratrása un alumno porque no tenga las potencialidades que esperamos de ellos.Hay que motivara todos los alumnos por igual, pueden llegara sorprendernos gratamente.
- El hilo conductor detodaevaluación Psicopedagógica tiene que ser la OBJETIVIDAD. El Psicopedagogo tiene queser una persona responsable, objetivay consciente y no dejarse lelvarpor comentarios o interpretaciones deprimera mano. Tieneque verificar datos, contrastarlos y compararlos y hacer de la Evaluación Psicopedagógica una herramienta útil y necesaria para atender así a la diversidad del alumnado.
- En cuanto a la última preguntacreo que el uso quese le da a la evaluación psicopedagógica es el correcto, auqnue muchas veces haya controversias con respecto a los resultados que se obtienen. Cuando un tutor pide que se realice tal evaluación es porque verdaderamente hay "algo"que evaluar. en manos de los Psicopedagogos estáel intentar dar la respuesta correcta que másbeneficie al alumno evaluado.
Realmente el artículo es muy interesante; interesante porque cuando nos situamos frente a cualquier tipo de evaluación, ésta debería estar totalmente desafectada por nuestras, llamémosla “debilidades”. Es cierto que no actuamos siempre de la misma manera. Con frecuencia anteponemos el llamado “efecto halo” que (no es más que predisponeros ante alguien), por su mirada, su forma de vestir, su aspecto físico, etc. un sin fin de sensaciones que rodean a las personas y que nos provocan ciertas reacciones, que cuando las ocultamos las convertimos en predisposiciones. Estas mismas predisposiciones son la que en determinadas situaciones, hacen, que se elija una opción a otra, sin valorar claramente la opción más idónea.
ResponderEliminarPero aún se agrava más si al tiempo se nos introduce el elemento que puede desencadenar reacciones incontroladas y ese no es otro que la simple inducción de la opción propuesta por alguien, dando por sentado que es la mejor, sin que medie, por nuestra parte, valoración sobre si es o no la mejor opción. Directamente nos predisponemos y aumentamos los criterios que de otra manera realmente no haríamos.
Queda patente en el artículo que en muchas ocasiones veremos a los alumnos bajo el prisma de sus debilidades, ocultando quizá nosotros mismos las potencialidades que pueden aflorar, simplemente, con nuestro cambio de actitud frente a ellos.
La investigación en muchos casos sufre incorrecciones por no controlar las variables que participan, o por conducir la investigación hacia nuestros propios propósitos quedando toda ella afectada por nuestra voluntad.
En el trato con los alumnos se ha de tener una predisposición positiva que enriquezca con valores una relación mutua y nos afiance con garantías frente a la diversidad.
Alumno: JOSÉ MARÍA DEL CAMPO TOCÓN.
EDUCACIÓN ESPECIAL. 2009. CEUTA.